Septiembre marca un cambio de ciclo año a año en nuestras vidas. Es el momento de la vuelta al cole, de apuntarse al gimnasio, y también de recuperar la actividad emprendedora y profesional.
Septiembre, en definitiva, es el momento de trabajar el “músculo profesional”.
Al igual que los deportistas inician la temporada recuperando el tono muscular, los profesionales debemos entender que tenemos que estar en la mejor predisposición para emprender nuestros próximos retos profesionales
1 – “Empezar el curso” asistiendo a un networking para reconectar con la “realidad profesional”
Si el síndrome post-vacacional te atenaza y paraliza, nada mejor que ponerse a caminar.
El networking te obliga a mantener un compromiso: mantener una reunión profesional, ejercitar el noble arte de escuchar, realizar una venta indirecta de tus productos o servicios.
En Consulta y Crece estaremos encantadas de tenerte como persona invitada en la próxima reunión de cualquiera de nuestros grupos de Vigo y A Coruña.
Te sentirás como en casa desde el primer minuto. Contáctanos si quieres asistir a una reunión en esta misma web, haz click aquí
2 – El networking es la respuesta
El primer antídoto probado contra el mal de “la soledad del emprendedor” se llama networking y se administra una vez por semana.
El networking va mucho más allá de una reunión entre empresarios directivos y emprendedores para obtener contactos y recomendaciones profesionales.
El networking de Consulta y Crece permite conocer de primera mano nuevas herramientas y utilidades digitales, obtener respuestas rápidas a las dudas del día a día, conocer convocatorias y oportunidades de negocio públicas o privadas.
Pero sobre todo, el networking permite poner en perspectiva las dificultades y retos a que nos enfrentamos, y también, obtener ideas y vías de solución de las mismas.
El networking es una suerte de terapia colectiva extraordinariamente sanadora.
3 – Networking, una carga rápida de batería
Si te está costando volver a la rutina después de un intenso verano, nada mejor que ponerte las pilas desde el principio para afrontar con ganas el último trimestre del año.
Podría decirse que Septiembre es el momento ideal para empezar a participar en un grupo de networking.
Nada más llegar conocerás un montón de proyectos diferentes con un nexo común, la ilusión por hacer crecer un negocio propio.
Enseguida te sentirás identificadx con situaciones y lugares comunes de las personas que conocerás en el networking.
Establecer una rutina de reuniones semanales te compromete a presentar tu proyecto, establecer reuniones “one to one”, empaparte de noticias, convocatorias, y micro-formaciones, y por supuesto compartir tus experiencias.
En resumen, entrarás sin darte cuenta en una dinámica creativa y productiva, retroalimentando tu negocio e incluso haciendo “terapia” frente a los bloqueos mentales que en ocasiones nos provocamos a nosotros mismos.
4 – Sembrar networking: presupuestos con más posibilidade
El networking ayuda a vencer las barreras de la desconfianza profesional.
No hace falta ser un profesional publicitario para decir que la recomendación persona a persona es hoy por hoy la herramienta de marketing más poderosa y la que mayores posibilidades de éxito ofrece.
El networking es un abrepuertas que nos facilitará la entrada en contacto con potenciales clientes y hará que nuestros presupuestos tengan mayores opciones de salir adelante.
Empezar a “sembrar” networking en septiembre nos hará entrar en una dinámica de movimiento continuo, asistiendo a las reuniones, aprovechando otros eventos, estableciendo redes naturales profesionales con clientes y, también, con potenciales proveedores.
Por último, no hay que olvidar que también somos clientes y que tener de mano proveedores de confianza nos facilitará una solución más optimizada para nuestras necesidades como negocio.
En Consulta y Crece tenemos networking en nuestra cadena de ADN. Un networking genuino y cercano. Y, además, estamos encantadas de recibir visitas.
Hay una silla para ti en Consulta y Crece, contacta con nosotras aquí.
